Quinta etapa: Similaun Hütte-Hochjoch Hospize-Vent: desnivel positivo: 602 m., desnivel negativo: 1693 m.
El recorrido de hoy nos lleva al refugio Hochjoch Hospize a través del collado Hauslabjoch, con la posibilidad de ascender la Fineilspitze, que no haremos por haber subido ya ayer. Aunque la previsión era dormir en el refugio, cuando llegamos podemos comprobar la escasez de nieve en sus alrededores, lo que unido a la nefasta predicción meteorológica para mañana, hará muy difícil hacer alguna actividad interesante, y casi imposible la ascensión a la montaña más alta del Tirol y segunda de Austria, el Wildspitze (3772n m.), por lo que decidiremos sobre la marcha hacer dos jornadas en una y bajar directamente desde Hochjoch Hospize hasta Vent, poniendo fin a la travesía.
Salimos de Similaun Hütte esquiando hacia Martin Busch Hütte perdiendo unos 100 metros de desnivel hasta la cota 2920 metros, donde ponemos pieles y subimos por el valle que aparece a nuestra izquierda en dirección al collado Hauslabjoch. Tras las primeras rampas, el recorrido gira hacia la izquierda para subir a un pequeño plateau en el que se encuentra el monumento a Ötzi, el Hombre de Similaun. Lo dejamos a nuestra izquierda y volvemos a girar hacia la derecha para afrontar los últimos metros hasta el collado Hauslabjoch (3279 m.).
Desde el collado bajamos andando unos metros sin mayor dificultad y empezamos a esquiar hacia el norte por el glaciar Hochjochferner, en el que hay que tener precaución con las grietas. El glaciar tiene muy poco desnivel y nos deslizamos lentamente atentos a cualquier irregularidad en la superficie que pueda delatar alguna grieta. Cuando por fin termina el terreno glaciar seguimos por el río, por su vertiente orográfica izquierda. Veremos un puente de metal que permite cruzar el río si hemos decidido hacer otra de las cumbres típicas de la zona, el Saikogel (3360 m.), que nosotros dejamos a nuestra derecha, hasta que por fin vemos en un promontorio el Hochjoch Hospiz (2412 m.). Encontramos una última pala inclinada que nos lleva hasta el torrente Rofenache, donde encontraremos un puente metálico para cruzarlo. Se acaba la nieve, por lo que decidimos no quedarnos en el refugio y continuar hasta Vent.
Con los esquís a la espalda, iniciamos la subida hacia el refugio, del que nos separan poco más de 100 metros de desnivel y seguimos directamente hacia Vent. En el descenso hasta Vent, unos 8 kilómetros que se recorren, a pie, entre dos y tres horas, la nieve no tiene continuidad y lo hacemos andando. Vamos por la vertiente este de la garganta y se nota mucho la diferencia con la vertiente oeste, en la que se ve nieve y multitud de cascadas de hielo a cada paso. Sin nieve no es más que un camino entretenido y muy bonito pero esta bajada con nieve puede ser bastante delicada, por el peligro de aludes y sobre todo porque en las partes más estrechas hay que esquiar muy cerca del precipicio que queda a nuestra derecha, con el riesgo de caída que supone. Al final, el camino se convierte en pista, y llegamos a Rofen, pequeña población con un hotel, en la que empieza la carretera asfaltada que en un par de kilómetros nos lleva hasta Vent. En Rofen podemos evitar seguir andando por el asfalto cruzando al otro lado del rio por un puente colgante que nos permite llegar a la vertiente oeste de la garganta, ya sin precipicios que impidan el tránsito, donde podemos calzarnos los esquís. Pasamos por un mirador al Wildspitze, hoy completamente tapado por las nubes y podemos seguir esquiando el kilómetro y medio que nos queda hasta las primeras casas de Vent, donde ponemos fin a nuestra travesía por el Ötztal. La etapa nos ha ocupado unas seis horas para 600 metros de desnivel positivo y casi 1700 metros de bajada.
En el caso de haber dejado el coche al comienzo de la travesía, en Obergurgl, podemos coger alguno de los autobuses que hacen el recorrido varias veces al día. Nosotros nos alojaremos en un hotel en Vent, aprovecharemos para darnos una merecida ducha, visitaremos Innsbruck al día siguiente, que estará nevando sin parar, lo que nos permitirá terminar nuestros días en Austria exprimiendo al máximo el forfait que pagaremos pasado mañana en la estación de esquí alpino de Solden, una de las grandes de los Alpes.
Actividad realizada por Nacho Fermín, Edesio Vidal, Angel Luis Santamaría, Rafael Domenech, Paco Briones, Juan Carlos Fernández, Raúl Montes, Manuel L. Espín y Pablo Parrón, del 22 al 26 de marzo de 2023.
