Domingo 8 de mayo de 2011, el
calor ya empieza a apretar en La
Pedriza en estas fechas pero todavía se puede disfrutar de la
escalada sin que los gatos se derritan en el granito, como pasa literalmente
muchos días del verano. Vamos Miriam López, Luis Martínez, Manuel Barranco y
Pablo Parrón, con intención de completar la pequeña maratón de escalada que
propone Luis. Salir del Tranco hacia Musgogénesis para hacer una vía de tres
largos, luego remontar por encima de este sector hasta Cinco Cestos para hacer
otra vía de tres largos (la
Psicoterapia), seguir remontando hasta El Elefantito para
ascenderlo por la ruta normal y, finalmente, escalar una fisura de
autoprotección cercana al Elefantito de la que no he visto reseña publicada
alguna y constituye uno de esos secretos con que La Pedri no deja de
sorprendernos después de las cientos de veces que la hemos visitado.
El meño de Cinco Cestos fue en su
momento un emblema de la escalada clásica de La Pedriza, cuando los medios
artificiales se usaban más habitualmente, pero hoy en día la escalada en la
zona se concentra esencialmente en las placas que se encuentran al lado. No es
zona de iniciación y el grado medio oscila el 6c pero tiene alguna opción
asequible como la
Colocausto (V+). La Psicoterapia es de las que figuran como
recomendadas en la Guía
de Barrabés y Luis se pone con el primer largo (6b+). Los primeros seis o siete
metros pueden hacerse directamente por la placa (expuesto porque no es fácil y
no hay protección posible) o mejor por los escalones de roca de la izquierda, hasta
la fisura por la que sigue el largo. Como el parabolt queda demasiado alto y la
caída tiene un buen coscorrón conviene meter un friend mediano antes de
montarse en la fisura y chaparlo. A continuación viene el paso más difícil
(6b+), que además es obligado aunque a partir de aquí está bien protegido. La
fisura se va cegando y al final conviene dar un par de pasos hacia la derecha y
llegar por lo más fácil a la reunión. Luis se da el largo sin mayor problema
pero los demás no lo vemos y lo hacemos todos de segundos y teniendo que tirar
de las cintas en algún momento.
Continúo por el segundo largo (6a),
que enlaza con otra fisura ligeramente a la derecha también protegida con
parabolts y que se ciega progresivamente. Algunos agujeros en la fisura
permiten avanzar cada vez más en adherencia hasta la segunda reunión.
Manuel inicia el tercer largo
(V), totalmente de adherencia, con el granito algo arenoso en los primeros
metros y luego por terreno más sencillo (IV+) hacia un árbol en el que se hace
la última reunión.
Para bajar lo mejor es buscar
unos veinte metros a la derecha una reunión con argollas para rapelar. Con
cuerdas de sesenta metros en una sola tirada estamos en el suelo.
Estando en Cinco Cestos merece la
pena subir los metros que nos separan del Elefantito, bien visible y que se
puede escalar en unos minutos por terreno que no supera el IV grado. La
tremenda similitud de la roca con el mamífero que le da nombre llama la
atención a primera vista y la foto no puede faltar.
Desde la misma trompa del
Elefantito se divisa a unos quinientos metros un bloque con forma de huevo
partido por una fisura perfecta totalmente vertical. Como no conocemos reseña
alguna decidimos llamarla la
Fisura del Huevo, para entendernos entre nosotros, y nos
acercamos pese a que la dificultad parece totalmente fuera de nuestros límites.
Luis ya la conoce y nos asegura que es asequible. Al llegar a ella se revela
efectivamente más asequible de lo que parecía y perfectamente protegible con
friends, que a poco finos que seamos pueden quedar colocados a cañón. Así que
los cuatro la probamos y coincidimos en que es diversión en estado puro, para
mí la mejor fisura que conozco en La
Pedriza hasta la fecha.
Datos prácticos:
Acceso: al aparcamiento del Tranco se
llega desde el pueblo de Manzanares el Real, a 63 kilómetros de
Madrid por la Carretera
de Colmenar Viejo. No hay mucho espacio para los coches así que hay que
madrugar. También se puede entrar en La Pedriza por el Parking de Cantocochino (desvío
indicado a la derecha a la salida de Manzanares).
Desde el Tranco
subimos por las escaleras al lado de Casa Julián y tomamos la Senda Carbonera,
marcada con pintura, hasta la
Gran Cañada. Desde el cruce de caminos en la Gran Cañada seguir
unos doscientos metros hacia el Este hasta que veamos el característico meño de
Cinco Cestos. Sólo queda llegar hasta las placas. En total aproximadamente una
hora.
Dificultad: 6b+, 6a, V.
Longitud: 75 metros.
Horario: una hora.
Material: la vía está equipada con
parabolts, lo suficientemente alejados para que haya que hacer todos los pasos
en libre. Conviene llevar algún friend mediano para proteger hasta llegar a la
primera chapa. Casco.
Más información:
- Guía de Escalada de La Pedriza, de Ignacio Luján y David Zapata, pág. 189. Barrabés Editorial.
- Un buen croquis: http://josetxu.com/c_pedriza_cincocestos.php
- Croquis del Elefantito: http://josetxu.com/c_pedriza_elefantito.php