El Risco de San
Pedro se encuentra en la Pedriza Posterior,
muy cerca de la Pared
de Santillana, y guarda similitud con ésta en cuanto a las características
setas de granito que permiten progresar con relativa facilidad por terreno muy
vertical. De los tres espolones que componen el Risco nos centramos hoy en el
tercer espolón, en el que un puñado de vías hará las delicias de los
escaladores más aventureros. La vía Pernas-Torrecilla, abierta por Gonzalo Pernas y Ignacio
Torrecilla, añade interés a la pared para los más intrépidos, pues a día de hoy,
permanece limpia de cualquier tipo de seguro fijo, a diferencia de la Directa Micológica,
que a pesar de haber sido abierta sin cuerda hace más de 20 años por Luis Gómez y Juan José Zorrilla, posteriormente
ha sido parcialmente equipada en su tercer largo y dos primeras reuniones para
poder rapelar, y de la excelente vía de Tino Núñez y Adolfo Díaz, Suspiros de Monja, que cuenta con algunos parabolts a lo largo de su variado recorrido.
Como contamos con la descripción
de los aperturistas pasamos a describir la vía con sus propias palabras. Así,
el primer largo (IV+) entra por una vira diagonal de izquierda a derecha, fácil
y estética, para seguir recto por un murillo de setas a por la gran laja de la
pared, bajo la cual montamos reunión, en una seta enorme. El segundo largo (V) sigue la gran laja
(algún friend grande irá bien) y luego una fisura-canalizo hasta el pie del
último muro, donde montamos reunión laceando una seta característica con
forma de amarre para barcos situada bajo el bloque cimero. El
tercer largo (V+) va por el muro del centro, entre las dos grandes grietas
equipadas, para luego descender por terreno fácil a la brecha situada entre el
segundo y el tercer espolón, donde encontramos las anillas para rapelar por la
cara norte. Puede seguirse por el último largo (6a) de la Directa Micológica,
una corta fisura de sexto rarita que se protege con un par de friends medianos,
de los que podemos tirar en artificial sencillo si vemos que no se deja, para
continuar por un canalizo fácil (IV), que en unos 20 metros nos lleva a la
cima del segundo espolón. Atención al delicado rápel, más información en la
reseña de Suspiros de Monja.
Vía abierta por Gonzalo Pernas y Ignacio Torrecilla, el 21 de diciembre de 2014.
Datos prácticos:
Acceso: partiendo
del Parking de Cantocochino cruzamos el puente de madera para coger la
autopista de La Pedriza,
en dirección al Refugio Giner y luego, pasando junto al Tolmo, hasta el Collado
de la Dehesilla,
donde giramos a la izquierda por un entretenido camino que nos obligará a hacer
alguna pirueta entre los bloques. Tras el tramo más empinado llegamos a la increíble
pradera de Navajuelos y después a la
Pared de Santillana, desde la que es perfectamente visible el
Risco de San Pedro, al este, que alcanzamos en leve descenso campo a través.
Dificultad: IV+,
V, V+, 6a (opcional).
Longitud: 100 metros aprox.
Horarios: unas tres horas hasta el pié
de vía, un par de horas para la vía, incluido el rápel de descenso y un par de
horas para la vuelta a Cantocochino.
Material: vía limpia. Llevar cintas
largas para lacear setas como seguros y como reuniones, y un juego de friends, alguno grande recomendable para la gran laja.
Cuerdas de 60 metros.
Casco.
Más información:
- Una buena descripción en El Rincón del Burcardo.
- La Pedriza Posterior, Guía de Escaladas, de Ana Lliso Súper y Juan Carlos Guichot Papila. Págs.
332-333. Ediciones Desnivel. 2018. Atención al primer largo, que va más a la
derecha de lo ilustrado en esta guía.
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