Tercera etapa: Martin Busch Hütte-Similaun Hütte: desnivel positivo: 792, desnivel negativo: 290 m.
Después
de la paliza de ayer, la subida al Similaun Hütte va a ser una jornada de
transición, corta, de suave desnivel y con un itinerario fácil de seguir en el
que es difícil perderse incluso con mal tiempo. A la
salida del refugio una señal indica la dirección hacia Similaun Hütte y un
tiempo estimado de un par de horas. Sólo nos separan en línea recta cuatro
kilómetros del objetivo, que además podemos ver casi desde el comienzo, la
mayoría por el glaciar Niederjochferner. Los quinientos metros de desnivel se
van ganando de manera muy progresiva, salvo en las últimas rampas, en las que
la pendiente es más acusada. Precisamente antes del comienzo de la parte final
más empinada, sale a nuestra derecha el valle que se dirige hacia la
Fineilspitze y el Hochjoch Hospize, por donde seguiremos nuestra travesía los
próximos días. Durante todo el trayecto las vistas a ambos lados merece la pena
disfrutarlas con calma, imaginando las innumerables líneas esquiables que
aparecen a cada paso.
El Similaun Hütte (3019 m.) se encuentra en territorio italiano, justo en la frontera entre Austria e Italia, y es el punto de partida ideal para ascender al Similaun (3606 m.), cima ineludible en esta travesía porque, además de ser de las más altas del Tirol, ofrece un terreno perfecto para el esquí en el que lo más frecuente será encontrar nieve en muy buenas condiciones. Aunque normalmente no es esquiable hasta la cima, la parte final es una sencilla arista muy vistosa que, sin duda, nos dejará bastante satisfechos.
Como la jornada ha sido corta y cuando llegamos al refugio queda aún casi todo el día por delante, algunos miembros del grupo decidimos darle un tiento y seguir hacia la cima del Similaun, a pesar del cambio de tiempo previsto y de que las nubes que están empezando a cubrir el cielo confirman sin lugar a dudas una tarde meteorológicamente movidita. No podemos pasar más allá del comienzo de la arista pero al menos podemos hacer algunos metros de bajada en la jornada y deleitarnos con un descenso perfecto, a pesar de la niebla y de tener que parar con frecuencia para verificar la dirección correcta y evitar las zonas más agrietadas y empinadas del glaciar. Mañana lo intentaremos el grupo al completo.
El desnivel obligado en esta etapa son 500 metros, de refugio a refugio, que con los esquís se pueden hacer sin problema en menos de dos horas. Si también subimos al Similaun hay que añadir 600 metros de desnivel y entre dos y tres horas para subir y bajar de nuevo al refugio.
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